El 17 de febrero se celebró el inicio de la Conferencia de Seguridad en Múnich, Alemania, donde se reunieron líderes de alrededor del mundo y expertos en seguridad que lideran la toma de decisiones acerca de ésta. El evento, celebrado desde 1963, dio lugar al primer encuentro entre la nueva administración estadounidense y líderes europeos. El Vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, utilizó su viaje a Europa para posteriormente reunirse con miembros de la Unión Europea y dirigirles el primer mensaje oficial de su administración. Asimismo, durante finales de enero se dio la visita oficial de la Primera Ministra de Reino Unido, Theresa May, a Estados Unidos. Su visita, aunada a los comentarios negativos del Presidente Trump hacia la UE, la OTAN y Alemania implicaron que los encuentros fueran recibidos como “señales contradictorias” para los europeos, quienes están todavía intentando descifrar el nivel de compromiso de sus aliados.