La región Asia-Indo Pacífico, caracterizada por su diversidad geopolítica, económica y cultural, epicentro de algunas de las economías más dinámicas del mundo y un punto clave para el comercio global, motor del crecimiento económico, con rutas comerciales y marítimas esenciales, así como por su influencia en la seguridad internacional, también es escenario de tensiones geopolíticas y disputas estratégicas que pueden redefinir el equilibrio de poder en el siglo XXI.