El Parlamento de Hungría aprobó el 20 de junio de 2018 la llamada Ley Stop Soros, legislación con la que se busca garantizar la seguridad nacional y la protección de las fronteras húngaras. Esta ley, aprobada con 160 votos a favor y 18 en contra, criminaliza y castiga con penas de hasta un año de prisión a los individuos u organizaciones que brinden ayuda a los inmigrantes irregulares que no sean objeto de persecución en su país de origen ni en cualquier otro Estado de tránsito hacia Hungría. Esta ley forma parte de la política de revisión de las leyes migratorias promovida e impulsada por el Primer Ministro Viktor Orbán y su partido político, Fidesz, mismo que cuenta con mayoría absoluta en el Parlamento. El nombre de la ley hace referencia al magnate estadounidense de origen húngaro, George Soros, a quien el Gobierno húngaro considera el principal promotor de la migración irregular en Europa y uno de sus principales adversarios. La Ley Stop Soros está dirigida exclusivamente a las organizaciones no gubernamentales dedicadas a temas migratorios, de manera que busca ejercer un mayor control sobre su funcionamiento y objetivos.